La reciente aparición en la app para dispositivos móviles iSéneca de una opción para gestionar el control presencial del profesorado mediante código QR o geolocalización ha provocado una reacción de perplejidad entre el profesorado por varias razones: por un lado, el profesorado utiliza sus teléfonos móviles particulares donde instala la aplicación iSéneca, por lo que se trata de emplear recursos privados de los docentes para el control de presencia –como en otras ocasiones, la Administración Educativa pretende implantar medidas a coste cero, algo que le viene funcionando habitualmente–. Por otro lado, no estamos informados en absoluto del uso que se hará de la información sobre geolocalización; aunque en un principio solo sea bajo autorización del usuario (docente), puede darse la situación de que en una actualización posterior se introduzcan modificaciones en la app que permita tener localizado al docente las 24 horas, lo que supone una clara invasión de la privacidad del profesional docente.
Dada la fuerte repercusión que está teniendo esta noticia entre los docentes andaluces, a través de redes sociales y grupos de WhatsApp, desde APIA proponemos la desistalación de iSéneca de los dispositivos móviles particulares de los docentes, empleando únicamente los dispositivos que suministre la Administración. Creemos que hay líneas rojas que no se deben traspasar y la geolocalización añade un grado más de desconfianza hacia el profesorado a la vez que ratifica la obsesión por el control que demuestran los responsables de la Consejería de Educación. Los que nos dedicamos a la enseñanza sabemos que existen otros métodos para asegurar el efectivo control de presencia del profesorado en sus centros de trabajo, sin necesidad de invadir el derecho a la privacidad de los docentes ni hacer uso de recursos particulares.